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Bonsái Sakura (Cerezo)

El bonsái cerezo tiene su origen en Japón donde se conocen con el nombre de bonsái sakura, donde estos árboles son un pilar fundamental de la cultura japonesa debido al poco tiempo que dura su floración y a su belleza tan efímera.

flores de un bonsai sakura cerezo

Estos bonsáis es la pieza más apreciada de muchas colecciones debido al reto que supone su cuidado. Requiere de muchos cuidados para conseguir una floración plena.

¿sabes cómo cuidar un bonsai sakura?  Vamos a verlo:

Cuidados bonsái sakura

  • Ubicación: requiere que le dé la luz del sol de forma directa, pero evitando las corrientes fuertes de vientos. Aunque necesitan el frío del invierno para desarrollar su ciclo, es necesario protegerlo de las heladas y de los días de calor del verano. Si vamos a refugiarlo, la mejor ubicación dentro de casa para un bonsái cerezo es bajo la ventana que más horas de luz pueda otorgarle, pero lejos de las fuentes de calor como calefactores, radiadores o el calor de la cocina.

  • Iluminación: Necesitan muchas horas de luz natural. Si lo tenemos dentro de casa es posible que necesitemos hacer uso de alguna luz artificial para bonsáis.

  • Temperatura: la temperatura ideal para estos bonsáis es entre los 15 y los 20º C. Aguantan mejor el frio que el calor. Las temperaturas superiores a los 35ºC pueden suponer su muerte del bonsái y por debajo de los -2ºC debilitará su floración (aunque algunos bonsáis sakuras son capaces de soportar hasta los -20ºC).

    bonsai cerezo florecido



  • Riego: moderadamente. Nunca hay que dejar que el sustrato del bonsái este completamente seco. En épocas de más calor, será necesario regarlo de forma modera casi a diario (incluso a diario), pero no en grandes cantidades y siempre con una regadera para disminuir la presión y facilite la absorción de oxígeno (si no tenemos regadera podemos utilizar una botella con el tapón agujereado.

  • Abono: El abonado debe de efectuarse en su periodo de crecimiento con abono orgánico y una vez al mes. El mejor momento para comenzar a abonar el bonsái es en primavera tras la floración y en otoño en cuanto termine el letargo estival y comience a crecer de nuevo.

  • Poda: la poda de mantenimiento y forma se la haremos en primavera (junto al alambrado). Es importante quitar todas las ramas débiles o que tengan una presencia enferma. Si queremos que su floración sea densa y bonita, no debemos volver a podarlo hasta pasado un año.

  • Pinzado: después de la floración comenzaremos a cortar sus puntas. En verano quitaremos las puntas de los nuevos brotes. Siempre utilizando tijeras finas.

  • Alambrado: en primavera. Debemos de tener cuidado con el alambrado, inspeccionarlo con cierta regularidad y cambiarlo cada mes o cada mes y medio, para evitar que se acabe hundiéndose en la corteza. Siempre debemos de utilizar un alambre anodizado.
  • Heridas: Estos bonsáis tienen un proceso de cicatrización muy rápido, si queremos acelerar la curación podemos aplicarle un poco de pasta selladora, pero muy poco.

  • Trasplante: Cada 3 años. Durante el trasplante debemos hacerle una poda generosa en las raíces quitándole todas las raíces en mal estado o con crecimiento vertical. Es importante lavarle las raíces y el cepellón (quitándole el suelo viejo).

  • Plagas: pulgones y moscas de cereza. Para eliminar los pulgones de un bonsái cerezo bastará con utilizar jabón potásico y una o dos horas después con un poco de aceite de Neem. Las moscas de cereza, únicamente coloniza el bonsái cerezo poniendo sus huevos dentro de las cerezas y estropeando el sabor de las mismas, podemos prevenirnos de sus ataques utilizando aceite de Neem como insecticida natural.

  • Hongos: es un bonsái muy resistente a los ataques de los hongos para prevenirlo podemos aplicar un fungicida antes de la floración.