El bonsái roble presenta sus orígenes en Europa y se da en gran cantidad en regiones de Asia, América del Norte, América del Sur y obviamente, en Europa. Este bonsái es muy conocido debido a sus ramas, frutos y hojas, que al no ser comunes de observar, cautivan la atención de quien esté observando.
Características del bonsái roble
Algunas de sus características más interesantes e importantes de saber, son las siguientes:
- Presenta ramas onduladas, las cuales crecen con diferentes direcciones.
- Sus hojas tienen un gran tamaño, pero este puede moldearse a gusto de cada persona si se utiliza la técnica correcta.
- A medida que el bonsái envejece, va tomando una forma más voluminosa y su copa se ensancha.
- Su hoja es caduca.
- Presenta un proceso lento de crecimiento.
- Su corteza se agrieta a medida que el bonsái crece y presenta un color formado entre la mezcla de negro y gris.
- Sus frutos son llamados bellotas y se encuentran recubiertos por una capa externa que los protege.
- Si es bien cuidado, puede durar vivo hasta incluso cientos de años.
- Tiende a atraer una gran cantidad de enfermedades a lo largo de toda su vida.
- Requiere mucha luz solar constantemente y de manera directa.
- Puede tolerar temperaturas elevadas tanto como temperaturas bajas.
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Cuidados del bonsái roble:
- Riego: Debe realizarse constantemente y de manera abundante, pero siempre evitando encharcamientos en el sustrato. Para ello debemos procurar que haya un buen método de drenaje, por el contrario, podrían aparecer hongos y/o el bonsái podrá debilitarse.
- Abonado: El abono debe ser preferentemente líquido y debe ser aplicado al bonsái una vez al mes en toda su etapa de crecimiento. La colocación del abono debe suspenderse en épocas que presenten temperaturas elevadas y luego de que el bonsái comience a brotar.
- Trasplante: Este debe realizarse a principios de la primavera, antes de que las yemas comiencen a abrirse, cada 2 a 3 años si el árbol es joven, y si el árbol es más viejo, debe realizarse cada 3 a 5 años. Al realizar el trasplante, debemos aprovechar para podar el bonsái, asegurándonos de conservar como mínimo 1/3 del tamaño total de sus ramas.
- Poda: La poda del bonsái roble debe realizarse a finales de invierno o principio de la primavera, antes de que las yemas se abran. Cuando el bonsái comience a brotar, debemos podarlo, asegurándonos de dejar la mitad o un poco menos de las hojas que presente cada rama. Además de ello, deben podarse las ramas que se encuentren enfermas. Luego de haber realizado la poda, deben sellarse todas las heridas del bonsái, utilizando pasta selladora, de esta manera podrá cicatrizar más rápido.
- Sustrato: El sustrato debe permitir un correcto drenaje del bonsái. La combinación recomendada para que no le falte nutrientes al bonsái, al tiempo que permite ejecutar un correcto drenaje, es de 70% akadama y 30% grava volcánica.
- Plagas y enfermedades: los bonsáis robles suelen padecer de moho polvoriento. Es una enfermedad de carácter fúngica. Podemos prevenir su aparición utilizando aceite de Neem y Jabón potásico en los meses de invierno (o cuando el ambiente presente una humedad excesiva). En caso de que aparezca, mezclaremos 10 gramos de bicarbonato de sodio, 10 mililitros de aceite de colza, 1 gota de detergente líquido en un 1 litro de agua y lo aplicaremos en un pulverizador una/dos veces a la semana, hasta que desaparezca.
Para evitar que el bonsái roble contraiga enfermedades o insectos de manera frecuente, debemos mantener el bonsái en buenos niveles de humedad y observar que no se presenten signos de mordeduras realizadas por insectos. Si se presentan mordeduras o ya se presenta el insecto, debemos eliminarlos cortando las hojas infectadas. En caso de que la plaga o la enfermedad ya se encuentre extendida o no queramos aplicar productos fuertes o podar a nuestro pequeñín, aplicaremos aceite de neem junto con jabón potásico.
El aceite de Neem junto al jabón potásico, son un fungicida e insecticida natural y es recomendable utilizarlo antes que aparezcan las plagas de forma preventiva. Son respetuoso con la biodiversidad positiva y evitan la aparición de plagas y enfermedades.
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